SCAN llamó a la prudencia a jóvenes que asumen retos para garantizar su vida de “mundo” al consumir drogas y alcohol para conducir un vehículo.
A la par con agencias policiales y sin fines de lucro, SCAN en su interés detalla estadísticas reales sobre eventos de cada diciembre.
Verónica Jimenez, coordinadora contra el uso de drogas y alcohol en SCAN, revela que conducir bajo efectos del alcohol o sustancias los lleva a distraerse aderezando el exceso de velocidad.
La Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y Salud reciente de SAMHSA mostró que más de 26 millones de personas de 16 años o más condujeron bajo la influencia del alcohol o drogas ilícitas durante el año pasado.
Aproximadamente el 16 por ciento de estas personas tenían entre 20 y 25 años. Texas se ha clasificado entre los 10 estados principales durante seis años consecutivos en cuanto a muertes relacionadas con el alcohol por cada 100 millones de vehículos, según NHTSA Driving Facts.
Hay formas de limitar la conducción en estado de ebriedad, entre ellas no dejar que sus amigos conduzcan después de haber consumido bebidas alcohólicas, hablar con sus adolescentes y adultos jóvenes sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol, y si sospecha que alguien está conduciendo en estado de ebriedad, llame a la policía.
Durante las fiestas debemos asegurarnos de socializar de manera segura y saber que tenemos el poder de prevenir tragedias y garantizar que aquellos que conocemos y nos importan lleguen y regresen de sus celebraciones.
Las fiestas pueden estar llenas de alegría y la prevención es clave. Recuerde que proporcionar alcohol a menores de 21 años es ilegal. Quienes son anfitriones son los que más pierden.










