El aumento del 25 por ciento en los consumos de agua debido a la intensa ola de calor por la que atraviesa Nuevo Laredo, así como la baja disposición de agua en el río Bravo, han disparado las alertas en la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA), por lo que exhorta a la población a redoblar esfuerzos y evitar tener que llegar al racionamiento del agua.
En conferencia de prensa dentro de Nuevo Laredo Comunica, la Gerente General de COMAPA, Silvia Fernández Gallardo hizo mención de la preocupante situación en la que se encuentra la ciudad.
“Actualmente tenemos un repunte del 25% en el consumo del agua desde el mes de mayo debido a las condiciones climatológicas, sin embargo el derroche de este recurso no renovable nos han llevado a presentar falta del suministro o baja presión en varios sectores” dijo la funcionaria.
Fernández Gallardo declaró que el nivel del río actualmente se encuentra en niveles muy bajos, en medida de una bomba sumergible de 1.60 m el agua del Río Bravo apenas llega a los 36 centímetros de profundidad.
De acuerdo a datos arrojados por la Coordinación de Operación de plantas, las tres plantas potabilizadoras suministran 2,700 litros por segundo (LPS) y el consumo está alcanzando sus límites con 2,535 LPS, un exorbitante consumo que no permite llenar tanques y cisternas y brindar agua de forma continua en toda la ciudad.
