Desde hace tres años el Centro Oncológico de Nuevo Laredo dejó de estar en funciones, volviéndose un proyecto inservible, inoperable, y convirtiéndose en ‘elefante blanco’.
De acuerdo con la Secretaría de Salud de Tamaulipas, se constituyó como el primer centro para tratamiento del cáncer en la región norte de Tamaulipas, que hasta el 2018 se promovía para recibir a pacientes con cáncer de Nuevo León y otros estados.
Con una inversión de más de 100 millones de pesos, ahora el edificio creado con recursos públicos, es decir de los ciudadanos, luce en malas condiciones, sucio, deteriorado, abandonado y solo protegidas sus entradas con cadenas y candados.
Ahora este es el reflejo de la falta de sensibilidad, visión, y seguimiento entre gobiernos estatales donde la afectación principal es para los enfermos de cáncer que cada vez más se tratan en Nuevo León.
Según cifras del 2018, el Centro Oncológico atendía a un promedio de 500 pacientes con cáncer, y en ese tiempo tenía una atención mensual de 171 enfermos oncológicos; sin embargo, actualmente se desconoce la atención que se brinda por la dificulta para entrevistar a directivos de la institución de salud.
Incluso en la información en la plataforma de la Secretaría de Salud estatal se destaca que desde el inicio de la presente administración ha incrementado su atención en un 263 por ciento mensual a diferencia de años anteriores, desde el inicio de operaciones en el 2013, pero la realidad actual es que el centro Oncológico luce vacío.
CIERRAN ENTRADA PRINCIPAL
La entrada principal que da acceso al inmueble está cerrada, habilitando otra entrada más adelante por el área de urgencias que para el público en general es desconocida.
Según un guardia de la institución la puerta principal que es de cristal desde hace un año está en riesgo de caer y para evitar algún percance que afecte a los pacientes oncológicos, la dirección dio instrucciones para cerrar, pero de igual manera se cerró el portón principal que da acceso al estacionamiento del inmueble.
Hay testimonio de pacientes oncológicos que se difunden en redes sociales, donde se captó en agosto del año pasado que se colocaron andamios con intención de arreglar la puerta, sin embargo, casi un año después ahí siguen las estructuras metálicas y nada que arreglen el daño a la puerta principal de acceso.
Pero el señalamiento de pacientes oncológicos va más allá de evidenciar daños en la infraestructura del edificio, denuncian la evidente falta de medicamentos para darle continuidad a los tratamientos que llevan los pacientes con este tipo de patologías y no hay respuesta, tampoco nadie se responsabiliza por que tanto el gobierno federal como estatal “se echan la bolita”.
