El Departamento de Policía de Laredo anunció un nuevo operativo navideño contra los conductores en estado de ebriedad, el cual se desplegará desde el próximo sábado hasta el primero de enero, advirtiendo fuertes multas y cárcel para los que sean sorprendidos.
Gracias a fondos específicamente canalizados por el Departamento del Transporte de Texas, para sacar a los ebrios de las calles, los oficiales estarán trabajando horas extras recorriendo los cuatro puntos cardinales de la ciudad con ese propósito.
El objetivo del Departamento de Policía de Laredo es disuadir a los conductores ebrios y coincide con el estado y con otras agencias locales para la aplicación de la ley en todo Texas.
Las estadísticas de Texas indican que aproximadamente cada 20 minutos alguien resulta herido o muerto en un accidente relacionado con el alcohol.
En Texas, el límite legal de intoxicación es 0.08 BAC. Si un oficial piensa que su conducción es inapropiada, puede ser detenido cualquier automovilista, aún sin ninguna prueba de sobriedad.
ESTAS SON LAS CONSECUENCIAS:
PRIMERA CONDENA
Multa máxima de $2,000. Hasta seis meses tras las rejas Suspensión de la licencia de conducir por hasta un año $1,000 o $2,000 cada año durante tres años para mantener su licencia de conducir.
SEGUNDA CONDENA
$4.000 dólares de multa como máximo. Hasta un año de cárcel. Suspensión de la licencia de conducir por hasta dos años. Hasta $2,000 cada año por tres años para mantener su licencia de conducir.
TERCERA CONDENA
$10.000 dólares de multa como máximo. De dos a diez años de prisión Suspensión de la licencia de conducir hasta por dos años $2,000 cada año por tres años para mantener su licencia de conducir.