Por este caso, elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) Guanajuato fueron detenidos y se abrió una investigación en su contra, luego de que en redes se difundiera un video del momento en que intentan detener —con uso de la fuerza y sin mostrar una orden de aprehensión— a un hombre que se dedicaba a la venta de tamales y que perdió la vida tras el arresto.
Se trata del caso del señor Juan Carlos Padilla, de oficio tamalero, quien se resistió a ser detenido la tarde del 23 de noviembre en Celaya, pues los agentes de la AIC Guanajuato no mostraron la orden de arresto y tampoco se identificaron, de acuerdo con testimonios.
Por su parte, la familia de Juan Carlos Padilla reunió fotos y videos que muestran el momento de la detención —el uso de la fuerza de los agentes de la AIC y la protesta de la ciudadanía ante las agresiones— para denunciar los hechos y la muerte del señor Padilla.
“Los judiciales mataron a mi papá, lo detuvieron con violencia sin cerciorarse a quien buscaban, no lo identificaron, se lo llevaron y ahora estoy en el hospital reconociendo a mi padre muerto, con golpes por todo el cuerpo, con mandíbula rota, pido que me ayuden a difundir esto para que llegue a los medios necesarios y se haga pronta justicia”, publicó la hija del señor Padilla en su cuenta de Facebook.
De acuerdo con medios locales, el señor de 54 años de edad fue detenido alrededor de las 16:00 horas en la calle Jaime Nunó y Felipe Ángeles de Guanajuato.
En ese momento, Juan Carlos se dirigía a un tianguis de la zona, cuando los agentes bajaron de una camioneta e intentaron arrestarlo.
Luego, al pedirles que mostraran la orden de aprehensión, los agentes se negaron y por este motivo Juan Carlos se resistió a ser detenido. Es más, para evitar que la policía se lo llevara, el señor Padilla se tiró al piso y en ese momento los agentes comenzaron a golpearlo y someterlo.
Al final, los agentes ministeriales lograron detener a Juan Carlos Padilla pero al ver qué el señor se encontraba grave, decidieron llevarlo al Hospital General de Celaya.
Lamentablemente (de acuerdo con los reportes de medios locales), al llegar al hospital, Juan Carlos ya no mostraba signos vitales… y tardó alrededor de 10 minutos en ser atendido por el personal médico.
Por su parte, la familia de Juan Carlos denunció que tras la detención, los policías no dijeron a dónde lo llevarían y por esta razón la búsqueda para conocer su paradero se hizo en las oficinas de la Fiscalía, la Comandancia Norte, los separos hasta que lo encontraron en el Hospital General de Celaya.
Al final, los familiares del señor Padilla —quien se dedicaba a la venta de tamales desde hace 30 años— acusó a la AIC Guanajuato por el uso excesivo de la fuerza y asesinato.