Un hombre fue condenado a 11 años de prisión por una violación luego de que su hija, que fue concebida en ese ataque, proporcionara ADN para probar la culpabilidad de su padre.
Carvel Bennett, de 74 años, fue declarado culpable de violar a una niña de 13 años en la ciudad de Birmingham, en Inglaterra, en la década de 1970, dejándola embarazada.
Su hija, que fue adoptada cuando era bebé, luchó por llevar el caso a la justicia tras descubrir detalles de su concepción en sus registros de nacimiento cuando cumplió 18 años.
La policía abrió una investigación después de que la BBC destacara su historia en 2019.
Los resultados de las pruebas de ADN mostraron que el acusado tenía 22 millones de veces más probabilidades de ser su padre que cualquier otro hombre afrocaribeño, según datos presentados durante el juicio.
El jurado de un tribunal en Birmingham tardó menos de dos horas en llegar a un veredicto de culpabilidad unánime.
La hija dijo que su padre había evadido la justicia durante demasiado tiempo.
‘Niña asustada’
La madre de la mujer, que no puede ser nombrada, le dijo al tribunal que tenía 13 años cuando Bennett le dijo que se quitara la ropa y se acostara mientras estaban solos en un dormitorio.
La menor había ido a la casa de Bennett a trabajar unas horas como niñera de sus hijos.
En una declaración leída por el fiscal del caso, la madre señaló que cuando fue atacada era «una niña asustada» y que había dicho a Bennett: «No quiero que hagas esto». Pero él respondió: «No digas nada».
«No pude pelear con él. Simplemente me dijo que me callara».